Las operaciones de transacciones de viviendas crecieron en julio un 6,5 %, lo que lo convierte en el sector de mayores ventas desde noviembre del 2009
Victoria Toro
Estados Unidos esperaba impaciente el dato de
ventas de viviendas usadas. Tras unos meses en los que se ha apreciado
una recuperación evidente de la economía del país, la cifra era
fundamental para entender el alcance de esa evolución positiva. Y se
confirmó. Las operaciones inmobiliarias crecieron en julio un 6,5 %, lo
que convierte a ese mes como el de mayores ventas desde noviembre del
2009. No solo eso, aquel mes fue excepcional para el mercado
inmobiliario porque finalizaba un programa del Gobierno que rebajaba la
fiscalidad en la adquisición de viviendas. Y comparado con julio del
2012, el de este 2013 registra un crecimiento del 17 %.
El mercado inmobiliario se está recobrando a un
ritmo mucho mayor de lo esperado, dicen los expertos. Aunque también
aparecen algunos avisos que piden un poco de precaución.
Y es que los tipos de interés de los préstamos
hipotecarios se están disparando. Las mayores subidas comenzaron el
pasado mayo, pero van a acelerarse en los próximos meses. La razón es
que la Reserva Federal estaba punto de anunciar que finaliza el programa
de compra de bonos, apoyados en bienes raíces, que puso en marcha para
reactivar la economía. Si en este momento el tipo medio de interés de
los créditos a 30 años está en el 4,40 %, se espera que para final de
año llegue al 5 %.
Los analistas creen que una parte del alza en las
ventas de viviendas durante los pasados meses, sobre todo en julio, se
debe a que los compradores se han dado prisa para firmar sus hipotecas
antes de las subidas. Pero el aumento de ventas de viviendas genera
confianza en el consumidor y otra cosa aún más importante, crece la
creación de empleo en la construcción.
«Una base sólida»
Todo esto lleva al economista jefe de La
Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR por sus siglas en
inglés), Lawrence Yun, a declarar: «La recuperación actual del mercado
de la vivienda tiene una base sólida». Eso mismo parece demostrar una
encuesta publicada hace dos semanas que dice que el 4 % de los
estadounidenses tienen la intención de comprar una vivienda en los
próximos seis meses.
Además, en contra de la subida de tipos de
interés de los créditos hipotecarios opera el descenso del desempleo
que, según un informe de Fannie Mae, caerá hasta el 7 % en el primer
trimestre del 2014. El aumento de puestos de trabajo es el mayor motor
para el crecimiento del mercado inmobiliario.
A la vez, las dos empresas dedicadas a la
concesión de créditos hipotecarios, Fannie Mae y Freddie Mac, que fueron
intervenidas por el Gobierno en el 2008, han registrado una
espectacular mejora de sus resultados. De los 187.000 millones de
dólares que Washington inyectó en estas dos compañías para evitar su
quiebra, ya han reembolsado 136.000 millones. Las dos empresas han
anunciado que en septiembre devolverán otros 14.600 millones más. Este
dinero ha permitido rebajar el déficit público.
A pesar de ello, Obama acaba de declarar que cree
que estas dos compañías deben desaparecer. En la decisión parece haber
influido la opinión de los republicanos y de un buen número de
economistas ultraliberales que achacan a Fannie Mae y Freddie Mac el
estallido de la crisis.