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domingo, 24 de agosto de 2014

Las filiales inmobiliarias de la banca pierden 1.800 millones

M. Martínez
Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell y Popular aún acumulan 140.000 millones brutos en inmuebles y en créditos a promotores.

Las filiales inmobiliarias de la banca pierden 1.800 millones

Los principales bancos sin ayudas públicas –que no han traspasado activos a Sareb, el banco malo– siguen absorbiendo el coste del riesgo inmobiliario, el gran lastre de la banca española durante los últimos siete años de crisis y el que, según los expertos, va a seguir siendo una rémora para la rentabilidad del sector durante aún muchos ejercicios.

Las unidades inmobiliarias de Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell y Popular perdieron otros 1.800 millones de euros en el primer semestre del año. Entre enero y junio de 2013, estas divisiones registraron números rojos de 1.644 millones, aunque la cifra no es comparable: no incluye el resultado del negocio inmobiliario de CaixaBank, que sólo este año ha comenzado a desglosar esta información (ver gráfico).

Exposición En esas unidades, los grandes bancos aún acumulan cerca de 141.000 millones de euros brutos en créditos al sector de promoción y construcción, inmuebles y participaciones accionariales en empresas ligadas a esta actividad, entre ellas, sus inversiones en el capital de Sareb. En los últimos doce meses, la exposición se ha reducido un 6,5%.

De este modo, el riesgo inmobiliario sigue erosionando las cuentas de resultados, que se están apoyando en las actividades de mercados, seguros e ingresos por participadas, ante la debilidad añadida del negocio puro de banca minorista.

CaixaBank ha sido el grupo que ha encajado mayores números rojos (468 millones) en el semestre. Se han contrarrestado con 418 millones de la actividad bancaria, 247 millones del seguro y 108 millones por participadas. Santander y BBVA también han visto cómo las pérdidas de sus divisiones inmobiliarias (307 millones y 446 millones, respectivamente) mermaban los beneficios de la actividad bancaria en España. En esta última partida, no obstante, los grandes bancos también contabilizan la aportación de gestión de activos y seguros, banca mayorista y las carteras ALCO(deuda pública para cubrir el riesgo de tipo de interés), entre otros.

En la misma línea, el área inmobiliaria de Popular perdió 299 millones de euros entre enero y junio. La principal fuente de ingresos para neutralizar este resultado fue el segmento de Mercados e Institucional, con una aportación de 322 millones. A distancia se sitúa la banca comercial (63 millones) y Gestión de Activos y Seguros (42 millones).

En el caso de Sabadell, las pérdidas antes de impuestos de la unidad de gestión de activos inmobiliarios alcanzaron los 271 millones en el semestre. La banca comercial generó 151 millones y la corporativa 38 millones. Sabadell Urquijo Banca Privada y Gestión de Inversiones sumaron 20 millones más. Otros segmentos no desglosados aportaron 216 millones.

Perspectivas Pese a las abultadas pérdidas que aún registran estas unidades, las entidades financieras aprecian un paulatino cambio a mejor. Por una parte, las exigencias de saneamiento de los activos, aunque aún elevadas, están disminuyendo, especialmente tras el importante esfuerzo en provisiones realizado en 2012. La incipiente recuperación económica y del mercado inmobiliario igualmente están dinamizando el ritmo de venta de la cartera.

Las desinversiones, a su vez, también deberían agilizarse con los recientes acuerdos alcanzados por la mayoría de bancos para ceder la gestión del riesgo inmobiliario a fondos oportunistas especializados.
Fuente: Expansión.com

El momento para comprar una vivienda

Juanma Lamet
Los analistas creen que el sector inmobiliario comienza a dar signos de estabilización. Sobre todo, en las grandes ciudades, en las que las oportunidades podrían comenzar a escasear. Además, los expertos ven con muy buenos ojos las inversiones particulares destinadas a rentabilizar el inmueble por la vía del alquiler.

Después de siete años como siete plagas, el mercado de la vivienda se acerca a velocidad de crucero hacia su punto de inflexión. Lo de tocar fondo ya no es un mero anhelo, como aquel «aterrizaje suave» que profetizaron políticos, promotores y demás augures del sector en los estertores de la fiebre del ladrillo, sino una realidad heterogénea, atomizada y áspera, sí, pero más luminosa, que aguarda a la vuelta de la esquina. El problema es que ese suelo del sector que ya se intuye es tan profundo que desde allí resulta difícil tomar el pulso del mercado residencial con rigor.

Igual que es complicado delimitar una era o incluso una crisis, acotar la mejoría del mercado residencial requiere siempre de criterios cualitativos, más que numéricos. ¿La crisis inmobiliaria termina cuando las ventas suben o cuando los precios crecen? ¿Mejorar unas cifras paupérrimas es algo positivo, o simplemente «menos malo»? ¿Habemus crédito bancario, de nuevo? Y, sobre todo, ¿ha llegado ya el momento de comprar?

He ahí la pregunta del millón, o el santo y seña de la recuperación. No cabe, como casi siempre en este sector, contestar un sí o un no categóricos, pero al menos la respuesta ya es optimista: es la hora de adquirir un piso para cada vez más gente. Dicho de otra forma, más que un buen momento, es un momento «propicio» para comprar. Ésa es la palabra.

Tras el septenio ominoso del mercado inmobiliario, esto es mucho decir, porque se trata de la constatación más fiable de que el final de la crisis está cerca. «El sector puede tocar suelo en 2014», como apunta José García Montalvo, catedrático de Economía de la Universitat Pompeu Fabra.

Puede ser un buen momento para invertir, pero ¿para quién? ¿y dónde? Los expertos no sólo coinciden en hacerse estas dos preguntas, sino en las líneas generales de la respuesta. En las grandes ciudades y para un comprador solvente, sí. «Para el comprador que puede acceder a un crédito es el momento de compra.

Debe tener una gran cantidad ahorrada, ya que tiene que poder pagar un 30% del valor de la vivienda de entrada –salvo que el inmueble pertenezca al banco– y además sumarle un 11% de gastos», apunta Carlos Smerdou, consejero delegado de Foro Consultores Inmobiliarios. «En los últimos meses se ha generado una gran demanda retenida de compradores así», agrega.

Un argumento que comparte José Antonio Pérez, director de la Cátedra Inmobiliaria del Instituto de Práctica Empresarial (IPE): «Es el momento ideal si quiere seleccionar ubicación prime, vistas, entorno, servicios, etcétera, siempre que el comprador tenga dinero ahorrado para pagar al contado en torno al 30%». Pérez va más allá y opina que la crisis de esos pisos de alto standing ya ha tocado fondo.

Junto con la solvencia, la clave es la zona, coinciden todos los analistas consultados. Lo explica Ángel Serrano, director general de negocio de la consultora Aguirre Newman: «Asistimos a un comportamiento asimétrico del mercado. Ya hay zonas donde la oferta se ha reducido mucho y el precio ya ha terminado de corregir, sobre todo en las almendras centrales de Madrid y Barcelona. Ahora es el mejor momento para comprar en estos mercados, sabiendo que ya se han producido operaciones muy atractivas e incluso cuesta encontrar ya producto de calidad en el centro de las grandes ciudades».

Pérez añade que «es el momento ideal para comprar en zonas de costa bien comunicadas, con vistas, en un entorno desarrollado y con servicios. Es un caballo ganador con ascendencia en los precios y en el que se producen transacciones». En el resto, sobre todo en el stock bancario mal ubicado, «es preferible esperar, porque bajará» aún más su precio, aconseja.

En esas circunstancias, la compra de vivienda se puede acometer como la de un bien de uso duradero, o como una inversión que dé una rentabilidad determinada. Para ello, Julio Gil, socio director de la consultora Horizone, recomienda «analizar muy bien el mercado en el que se quiere comprar, porque en algunos sitios la estabilización llegará pronto y en otros tardará bastante».

También hay que tener en cuenta «las circunstancias personales, la localización concreta de la vivienda» y, sobre todo, «aprovechar las oportunidades de compra por debajo de mercado, que ahora mismo hay muchas», subraya Julio Gil. O sea, los chollos.

Rentabilidad por alquiler Zona y rentabilidad. Éstas son las dos palabras mágicas –junto con la financiación–, porque no sólo son las variables fundamentales por separado, sino que, por fin, comienzan a confluir en muchos submercados, ya que, al tiempo que el encefalograma de la vivienda se va angulando, la curva del descenso de los precios se comienza a aplanar. De esta forma, si bien hay recorrido a la baja en la mayoría de los nichos de oferta inmobiliaria, en las grandes urbes y en las zonas sin mucho stock el tren de las gangas y de los aciertos rotundos pasará de largo más pronto que tarde para los inversores no avisados. «Es el momento de invertir pensando en que no caigan mucho más los precios en la zona y que el alquiler dé rentabilidad por encima de los depósitos y la deuda», sentencia Carlos Smerdou.

La rentabilidad por alquiler es clave para tomar decisiones. Actualmente la vivienda media española (80 metros cuadrados a un coste medio de 1.459 euros por metro, y 542 euros mensuales de alquiler) proporciona un rendimiento neto anual por encima del 4% (en mayor o menor medida, dependiendo de los gastos). Esto es, muy superior a lo que ofrece la deuda soberana española a 30 años –tan duradera como una hipoteca– en los mercados secundarios de bonos (3,32%).

Otra razón, esta vez histórica, que apunta a que el sector se acerca al cambio de tendencia es la de la experiencia previa: el mercado suele comenzar su crisis cuando caen los precios en la Costa del Sol y en Madrid e inicia la recuperación cuando ambas zonas salen de números rojos (sobre todo Marbella y el barrio capitalino de Salamanca). «Es así, al menos, desde 1981, y ahora está ocurriendo; vemos una mejora», apunta Smerdou y lo corrobora Serrano.

Una última razón para aventurarse a la compra o a la inversión en vivienda es que las entidades financieras están comenzando a abrir poco a poco el grifo hipotecario. Si bien el saldo vivo de financiación sigue cayendo, el crédito nuevo repunta por fin.

«En algunas entidades la nueva producción de crédito hipotecario está subiendo con fuerza», apunta García Montalvo. «O sea, que hay más demanda», colige. Y tanto que hay más: las transacciones de inmuebles residenciales subieron un 48,4% en el primer trimestre del año.

Siguen siendo pocas, pero el dato mejora. A nadie se le escapa que, al menos a larguísimo plazo, el sector inmobiliario no volverá a ser lo que era... eppur si mouve.
Fuente: Expansión.com

viernes, 22 de agosto de 2014

España lidera la recuperación de la construcción en la UE

 

España fue además el cuarto país de la UE con la mayor producción interanual en la construcción en junio, con un aumento del 6,8 %. Dicho esto, el ritmo de avance se ha moderado notablemente si se compara con los crecimientos anuales del 46% en mayo y del 55,4% en abril, datos que han permitido a la construcción española liderar la recuperación en el trimestre.

eu España lidera la recuperación de la construcción en la UE

Dicho esto, en junio la actividad constructora española en sufrió un bache, ya que en este mes registró una caída del 2,9 % frente a mayo, lo que supuso el segundo mayor descenso de los Veintiocho.

En el conjunto de la UE y en la eurozona, la producción en la construcción aún no experimenta tasas positivas, y cayó un 0,6 % en ambas zonas en el segundo trimestre. Los datos mensuales en Europa también siguen en negativo, con descensos en junio del 0,3 % en la UE y un 0,7 % en la zona del euro.En términos interanuales, la producción en la construcción descendió un 0,5 % en la UE y un 2,3 % en la zona del euro.

El descenso del 0,7 % en la construcción en la eurozona en junio comparado con el mes anterior se debió a una disminución en la construcción de edificios (un 0,9 %) y en ingeniería civil (0,5 %).

En la UE, la bajada del 0,3 % tiene su origen en la caída del 0,5 % en la construcción de edificios y del 0,2 % en la ingeniería civil, según Eurostat.

Los mayores descensos de la producción en la construcción se registraron en Hungría (7,5 %), España (2,9 %), Rumanía (2,6 %) y Eslovaquia (2,3 %), en tanto que los incrementos más pronunciados se observaron en Polonia (2,7 %), Alemania (1,2 %) y en la República Checa y el Reino Unido (1,1 % en ambos casos).

De un año a otro, la bajada del 2,3 % en la construcción en la eurozona en junio se debió a una disminución en los edificios (2,0 %) y en la ingeniería civil (3,4 %).

En el conjunto del bloque comunitario, la caída del 0,5 % se basa en un descenso del 0,2 % en la construcción de edificios y del 2,7 % en la ingeniería civil. En este caso las mayores caídas en la construcción se dieron en Rumanía (13,1 %), Portugal (10,3 %), Eslovaquia (5,0 %) y Holanda (3,5 %), mientras que las subidas más fuertes se las anotaron Eslovenia (28,7 %), Hungría (9,8 %), Polonia (8,0 %) y España (6,8 %).
Fuente: ADAIX GROUP

viernes, 1 de agosto de 2014

España empieza a superar sus miedos a alquilar

Este régimen vive su mejor momento en muchos años
  • La sociedad se va despojando de prejuicios como 'alquilar es tirar el dinero' o 'el casero puede echarme de su casa cuando quiera'

  • La gran oferta disponible pone en bandeja todo tipo de producto

  • 'El alquiler es más rentable para economías familiares y se logra mantener nivel de vida adaptado a las posibilidades de cada uno'

Un joven mirando pisos en alquiler en el escaparate de una...
Un joven mirando pisos en alquiler en el escaparate de una inmobiliaria. MITXI
La compañía Alquiler Seguro es buen ejemplo del renacer de este modelo. Echó a andar en 2007 y desde entonces no ha parado de crecer de modo exponencial. La firma ha presenciado en primera persona cómo la potencial demanda de viviendas en este régimen se ha ido despojando de prejuicios tales como 'alquilar es tirar el dinero', 'el casero puede echarme cuando quiera', 'el piso alquilado no es mi casa y el comprado sí' y 'no voy a encontrar una vivienda en arrendamiento que se adapte a mis necesidades'.
'Con lo que se paga por un piso en propiedad (hipoteca, impuestos, seguros, etc.) da para tres vidas en alquiler'
David Caraballo, director comercial de Alquiler Seguro, desmonta estos miedos, al tiempo que cree que una parte de los ciudadanos también lo ha hecho. ¿'Alquilar es tirar el dinero'? En su opinión, "con lo que se paga por un piso en propiedad (todos los gastos relacionados con la hipoteca, impuestos, seguros, etc.) se puede vivir tres vidas en alquiler". "Según cálculos económicos", prosigue, "el alquiler resulta más rentable para las economías familiares e incluso se evita el apalancamiento económico que supone una hipoteca". En este sentido, el experto indica que "con el alquiler se consigue mantener un nivel de vida adaptado a la economía de cada uno y se evita el lastre de una hipoteca, de cuyos beneficios sólo podrán disfrutar los hijos".

En cuanto al temor a que el casero invite a irse al inquilino unilateralmente, Caraballo piensa que esta circunstancia es cada día más improbable. "Hoy en día gran parte del parque residencial destinado al arrendamiento tendrá esta función durante toda su vida útil, por lo que el miedo a que el arrendatario tenga que dejar la vivienda porque el propietario la necesite se ha diluido de manera importante", señala. 

Otro de los recelos hacia el alquiler era la escasa oferta, que en muchas ocasiones hacía imposible encontrar a los interesados los inmuebles que necesitaban. Ahora, tanto particulares como promotores y profesionales han hallado en este régimen la mejor vía para explotar sus inmuebles, cuyo precio de venta se ha desplomado. "Hace años en España la oferta de compraventa era prácticamente la única y la oferta de alquileres era mínima, por lo que las expectativas de los potenciales inquilinos no se cumplían. Hoy el incremento de este mercado hace posible dar con viviendas en arrendamiento que se adaptan a todas las necesidades y gustos", puntualiza el director comercial de Alquiler Seguro.
'Antes tener un alquiler era como una hipoteca, pero tras el estallido de la burbuja las cosas han cambiado'
Por último, el gran prejuicio hacia el alquiler de que 'se paga por algo que nunca va a ser tuyo' también, según Caraballo, está perdiendo adeptos. Reconoce que, normalmente, el inquilino siempre carga con el lastre de la insatisfacción del sentimiento de propiedad porque es una idea que se ha transmitido de generación en generación, aunque esto también ha cambiado. "Antes, tener un alquiler era como tener una hipoteca, pero tras el estallido de la burbuja las cosas han cambiado. Los costes son mucho menores, proporcionales al uso, si se vive en alquiler", argumenta. Caraballo no menciona, en este punto, un hecho que ha calado en la sociedad: una casa hipotecada no es sólo del hipotecado, sino también del banco.

Quizá por la superación en parte de los temores, Caraballo percibe que "en España se empieza a ver un cambio en el paradigma tradicional respecto al alquiler, aunque este régimen aún no está afianzado como en otros países de la Unión Europea". De este modo, no duda en utilizar en contraposición al recelo ante el alquiler la siguiente reflexión (casi eslogan) en favor del arrendamiento: "compro donde puedo y vivo (en alquiler) donde quiero". Sensación e idea que también está calando en la sociedad revirtiendo, según el director de Alquiler Seguro, "el paradigma de la compra que nuestros abuelos nos metieron en la cabeza".
Fuente: EL MUNDO

Todos los cambios de última hora que se incluirán en la reforma fiscal

Mejora el trato fiscal a la indemización por despido, alquiler y plusvalías
  • Las grandes líneas ya anunciadas en junio no sufren modificaciones relevantes
cambios reforma fiscal
El ministro de Hacienda y 
Administraciones Públicas, 
Cristóbal Montoro.
(EFE)
Las grandes líneas de la reforma fiscal que aprobará mañana el Consejo de Ministros siguen el borrador del Gobierno ya publicado en junio. Se mantiene intacta la rebaja de tipos en el IRPF y en el impuesto sobre sociedades, los dos cambios más relevantes. Sin embargo, la negociación con agentes sociales y organizaciones ha llevado al Ejecutivo a incluir modificaciones en el anteproyecto. Estos son los cambios más relevantes que ha sufrido el borrador de reforma fiscal que hoy se convertirá en un anteproyecto de ley:

Indemnización por despido

Fue la medida anunciada en junio por el Gobierno y que generó más polémica. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, señaló que la reforma fiscal limitaría la exención por despido a 2.000 euros anuales. Al Gobierno no le ha costado rectificar en una decisión cuyo coste económico es limitado y, tras negociar con los agentes sociales, el anteproyecto de ley fijará que la exención será del 100% cuando el monto total de la indemnización no supere los 180.000 euros. Es el régimen que sigue Navarra o la Diputación de Guipúzcoa. El 99,9% de los potenciales afectados no tributará en caso de despido, señala Hacienda.


Plusvalías

El borrador de reforma incluyó la supresión a partir de enero de 2015 de los coeficientes de abatimiento y correcciones por inflación que hasta ahora permitían reducir la plusvalía que tributaba en el IRPF cuando se vendía un piso, acciones o un fondo de inversión. El cambio es drástico y encarece notablemente el coste tributario de vender una casa, especialmente si es vieja. Sin embargo, el Gobierno paliará parcialmente este castigo fiscal al introducir en el proyecto de reforma fiscal una exención para las plusvalías obtenidas por contribuyentes mayores de 65 años y que destinen el dinero logrado por la venta a una renta vitalicia.


Alquiler

La reforma fiscal también modifica, y a peor, el tratamiento fiscal al alquiler. El borrador contemplaba que la reducción fiscal del 60% que se aplican con carácter general los propietarios de una vivienda en alquiler se redujera al 50%. Además, se eliminaba la exención del 100% para los contribuyentes cuyos inquilinos tienen menos de 35 años. El Gobierno ha rectificado y  mantendrá la reducción en el 60%, sin embargo, mantiene la supresión de la exención para los caseros con arrendatarios jóvenes. Por otra parte, también se suprime la deducción del 10,05% que se aplican en el IRPF los inquilinos con rentas inferiores a 24.107,20 euros, aunque la medida no tendrá efectos retroactivos y aquellos que hoy se benefician de la deducción podrán mantenerla hasta que expire su contrato de alquiler.


Se amplía el beneficio en I+D

El Ejecutivo fijó en la Ley de Emprendedores un nuevo incentivo para las empresas con derecho a aplicar la deducción en I+D, pero que tienen cuota suficiente en el impuesto sobre sociedades. En este caso, se permitió que la compañía pudiera solicitar el abono de la deducción con un límite de tres millones de euros. La reforma fiscal mantiene intacto esta ventaja fiscal y, además, eleva el límite hasta los cinco millones.

Fuente: Cinco Días

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