EL ESCÁNDALO DEL LIBOR EN EL REINO UNIDO PONE EN DUDA LA CREDIBILIDAD DEL ÍNDICE HISPANO
Enrique Utrera
08/07/2012
06:00h
¿Conoce algún banco dispuesto a prestarle dinero a un tipo de interés del 1,118% a un año?
La respuesta es no. Pues ese el precio medio, el más bajo de la
historia, al que las 43 entidades financieras que participan cada día en
la formación del Euribor dijeron el viernes que están dispuestas a
prestarse dinero entre ellas.
Otra cosa bien distinta es que lo hagan: el mercado está cerrado a cal y canto desde hace muchos trimestres.
Es, hablando en plata, un mercado virtual. Una pura ficción que de
momento está siendo muy, muy rentable, para los cientos de miles de
españoles que pagan cada mes la letra de la hipoteca en un escenario de
creciente crisis económica.
“A ver cómo se
explica que el Euribor esté en mínimos históricos mientras la
desconfianza entre los bancos europeos está en niveles máximos, sin
precedentes”, asegura Pau Monserrat, de iAhorro.com, que explica
que es imposible que el indicador del que dependen las hipotecas de
miles de españoles refleje la realidad en un mercado “en el que el Banco Central Europeo (BCE) deja dinero a la banca, pero la banca no se lo presta a nadie”.
La
Europa económica está en estado ‘shock’ por el escándalo provocado por
el intento de manipulación del tipo de interés Libor en el Reino Unido.
Una polémica de tal calado que se ha llevado por delante a la cúpula de
Barclays y que podría afectar también a otra entidad británica como
HSBC. Ambas participan también en la fijación diario del precio del
Euribor.
El escándalo es de unas proporciones siderales. El Libor sirve también para fijar los tipos de los contratos de futuros, de los swaps de
tipos de interés o sobre la inflación y multitud de créditos sindicados
que las empresas firman con los bancos. El año pasado sirvió de
referencia para firmar operaciones por valor de más de 550 millones de
dólares.
Analistas y expertos ponen sobre
la mesa estos días todo tipo de teorías sobre los riesgos de la fijación
de tipos que nada tienen que ver con la realidad del mercado. En
España, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha exigido "transparencia con el Euribor”, al que están asociadas el 89% de las hipotecas a tipo variable que se firman en el país.
Si
se tiene en cuenta que el 95% de las hipotecas que se firman en España
son a tipo variable, la exposición de las familias españolas al Euribor
es extraordinaria. Pero de momento, lo que hemos denominado como ficción
del Euribor está resultando muy rentable para los ciudadanos de a pie.
“Ni en el mejor de sus sueños podrían imaginar pagar estos tipos, que
son una auténtica baratija. El desfase con los tipos reales de mercado es sencillamente brutal”, aseguran desde la mesa de renta fija de un banco español.
Las
cifras no pueden ser más elocuentes. Mientras el Euribor a un año se
sitúa en el 1,118% tras la rebaja histórica de los tipos de interés en
Europa decidida el jueves por el BCE, las letras españolas pagan un 3,9%
en el mismo plazo. Y en el resto de referencias más de lo mismo. El interbancario a seis meses ofrece el 0,83% frente al 3% de las letras, y a tres meses el 0,54% y el 2,15% respectivamente.
Cuando
había liquidez y operaciones, el Euribor funcionaba como un préstamo
entre bancos sin garantía de devolución. Es decir, con riesgo de
crédito. “La estructura es exactamente igual que la de un bono senior,
una cesión de liquidez sin garantías de recuperación. Pues bien, un bono
senior de un gran banco español como Santander con vencimiento en
septiembre de 2013 se compra al 4,5%. ¿Cómo se come que entre los bancos
se estén prestando entre ellos al 1,11%?”, se preguntan en la mesa de
tesorería de una gran caja española.
Las alternativas
¿Cuánto puede durar este presunto chollo para los hipotecados españoles? Desde abril, hay una nueva referencia hipotecaria llamada IRS. Son las siglas de Interest Rate Swap
o permuta de tipos de interés. Este indicador recoge el tipo de interés
a cinco años esperado por los mercados de futuros y es más estable.
“Como sí se realizan operaciones, el IRS sí recoge la realidad”, explica
Pau Monserrat.
Un swap de tipos de
interés es un instrumento derivado por el que dos contrapartidas
acuerdan un intercambio de flujos consistente en el pago de intereses
fijos periódicos por una de las partes a cambio de que la otra le pague
intereses variables referenciados a un índice determinado. El nominal de
referencia en ningún momento se intercambia, por lo que el riesgo de
crédito es mínimo.
Si los bancos permutaran
el Euribor por el IRS, las repercusiones sobre el bolsillo de los
españoles serían inciertas. Desde la entrada en vigor del euro, el tipo
medio del IRS supera con creces el del Euribor. Pero hoy por hoy el IRS
no se utiliza entre las entidades financieras españolas. Los expertos
creen que a medio plazo lo lógico es que las entidades ofrezcan la
opción de elegir entre las dos posibilidades.
“El escándalo del Libor en el Reino Unido debería acelerar el proceso. Es de tal magnitud que el efecto dominó deja la credibilidad del Euribor bajo mínimos”, señalan en un gran banco español.
No hay comentarios:
Publicar un comentario