Hipoteca
El Congreso dará luz verde al
decreto que recoge el código de buenas prácticas para que los bancos
acepten la dación en pago. El ministro de Economía, Luis de Guindos,
ha alertado de que una generalización de la dación en pago supondría
una reducción en la concesión de créditos y eso haría aún más daño. El PSOE y UPyD han votado en contra de esta norma y CiU y PNV lo han apoyado, pero con matices.
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| El Producto Interior Bruto (PIB) español entre los meses de enero y marzo de este año también vendrá marcado como el trimestre anterior por una contracción económica arrastrando al país a una nueva recesión, según declaraciones del ministro de Economía y Competitividad. En al imagen, el ministro de Economía, Luis de Guindos, escucha un discurso del presidente, Mariano Rajoy, en el Congreso de los Diputados, en Madrid, el 14 de marzo de 2012. REUTERS/Andrea Comas |
Nuevo paso para que la entrega de la casa en caso de
desahucio sea una posibilidad algo más real que hasta ahora. El Congreso
va a aprobar este jueves el decreto ley que incluye las nuevas medidas
que quiere implantar el Gobierno para frenar los embargos entre las
familias más humildes.
La norma incluye un código de buenas prácticas para que las entidades financieras acepeten la dación en pago en determinados casos . A cambio, recibirán ciertos beneficios fiscales.
Así, los bancos tendrán la obligación de negociar una restructuración del pago de la hipoteca durante cuatro años y una apliación del plazo del préstamo hasta 40 años. Si aún así, el titular de la hipoteca no puede hacer frente al pago de la misma, se prevé una quita de parte de la deuda y, ya como último recurso, se contempla la entrega de la vivienda.
El minisitro de Economía, Luis de Guindos, ha defendido en el Congreso que con este decreto el Gobierno se pone del lado de las familias más desfavorecidas para evitar la "traumática y frustante" situación que supone tener que entregar la casa.
Y ha destacado que la dación en pago debe ser la "última opción" porque sus consecuencias pueden ser muy graves. Para De Guindos "a menudo se habla de la dación en pago como la solución mágida de los desahucios", pero se debe evitar su "generalización" porque podría llevar en el futuro a una reducción de la concesión de crédito".
Solo podrán beneficarse de estas medidas aquellas familias con pocos recursos, que tengan a todos sus miembros en paro y no tengan ningún tipo de renta por trabajo, actividad económica o bienes con los que puedan hacer frente a la hipoteca de su primera vivienda.
Además, entre otros requisitos, la cuota deberá ser superior al 60% de los ingresos.
El debate sobre esta iniciativa -de gran calado social- ha coincidido con la huelga general. El PP solo ha conseguido el apoyo de CiU y PNV, que han votado a favor pero con matices. Para los nacionalistas vascos el decreto es "tímido", pero "más vale algo que nada". CiU considera que se tenía que haber hecho antes.
Tanto CiU como De Guindos y el diputado Vicente Martínez-Pujalte han destacado la "incoherencia" del PSOE por votar en contra de un decreto que va a dar aire a las familias sin recursos que no pueden hacer frente a la hipoteca.
Según el exministro Valeriano Gómez, diputado socialista, este decreto "tiene más humo que nueces" y apenas va a beneficiar a un 2% de las familias debido a las altas restricciones que impone.
Pere Macías, de CiU, ha respondido a este argumento rescatando la idea de De Guindos: una ley de dación en pago "más agresiva" supondría un "encarecimiento del crédito", lo que afectaría al 2% de familias que no pueden hacer frente a la hipoteca, sino "al 98% restante".
Fuente: lainformacion.com
La norma incluye un código de buenas prácticas para que las entidades financieras acepeten la dación en pago en determinados casos . A cambio, recibirán ciertos beneficios fiscales.
Así, los bancos tendrán la obligación de negociar una restructuración del pago de la hipoteca durante cuatro años y una apliación del plazo del préstamo hasta 40 años. Si aún así, el titular de la hipoteca no puede hacer frente al pago de la misma, se prevé una quita de parte de la deuda y, ya como último recurso, se contempla la entrega de la vivienda.
El minisitro de Economía, Luis de Guindos, ha defendido en el Congreso que con este decreto el Gobierno se pone del lado de las familias más desfavorecidas para evitar la "traumática y frustante" situación que supone tener que entregar la casa.
Y ha destacado que la dación en pago debe ser la "última opción" porque sus consecuencias pueden ser muy graves. Para De Guindos "a menudo se habla de la dación en pago como la solución mágida de los desahucios", pero se debe evitar su "generalización" porque podría llevar en el futuro a una reducción de la concesión de crédito".
¿Quién puede beneficiarse?
Solo podrán beneficarse de estas medidas aquellas familias con pocos recursos, que tengan a todos sus miembros en paro y no tengan ningún tipo de renta por trabajo, actividad económica o bienes con los que puedan hacer frente a la hipoteca de su primera vivienda.
Además, entre otros requisitos, la cuota deberá ser superior al 60% de los ingresos.
PSOE y UPyD votan en contra
El debate sobre esta iniciativa -de gran calado social- ha coincidido con la huelga general. El PP solo ha conseguido el apoyo de CiU y PNV, que han votado a favor pero con matices. Para los nacionalistas vascos el decreto es "tímido", pero "más vale algo que nada". CiU considera que se tenía que haber hecho antes.
Tanto CiU como De Guindos y el diputado Vicente Martínez-Pujalte han destacado la "incoherencia" del PSOE por votar en contra de un decreto que va a dar aire a las familias sin recursos que no pueden hacer frente a la hipoteca.
Según el exministro Valeriano Gómez, diputado socialista, este decreto "tiene más humo que nueces" y apenas va a beneficiar a un 2% de las familias debido a las altas restricciones que impone.
Pere Macías, de CiU, ha respondido a este argumento rescatando la idea de De Guindos: una ley de dación en pago "más agresiva" supondría un "encarecimiento del crédito", lo que afectaría al 2% de familias que no pueden hacer frente a la hipoteca, sino "al 98% restante".
Fuente: lainformacion.com
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