CARTA A PEPE IGNACIO ANDRÉS MIRANDA
Creíamos que el PSOE iba a cambiar de estrategia en esta campaña electoral, para la que aún quedan cuarenta y nueve largos días, Pepe Ignacio, pero siguen como siempre con las trampas y las mentiras. Agitando al manido dóberman con el que identifican a la derecha, y acusándola de practicar recortes sociales, como si ellos no hubieran dejado a España en quiebra y con los mayores recortes sociales de esta "sui generis" democracia.
Acusan al adversario de lo que ellos han practicado en exceso, y llegan al final de su delictiva gestión alentando o amparando incumplimientos graves de la ley, como la tolerancia con las huestes de "perroflautas indignados" que quieren vivir del Presupuesto sin trabajar, como los sindicatos, o las huelgas de la enseñanza y los manifiestos de los subvencionados de la ceja. Maestros de la mentira, tratan de confundir a los electores. Y acusan al PP de lo que los gabinetes zapateriles han practicado en exceso, llevando a la quiebra a este país un día llamado España, que si quiere sobrevivir a las tropelías socialistas no tiene más remedio que aplicar duros recortes como los que tendremos que asumir los canarios.
* * *
De momento, ya nos están cerrando quirófanos en las Islas. Y después de las elecciones veremos lo que el bipartito nos prepara, con un presidente regional al que se le han agotado los trucos para seguir en el machito. ¡Ya hasta el candidato del PSOE, el exministro del Interior, dice que lo de la "Guanchancha" es un despilfarro! Mientras, despliega una campaña, acusando al presunto futuro Gobierno de Rajoy de que practicará recortes en sanidad, educación y pensiones que ya están ellos aplicando en los actuales presupuestos estatales; que no se han atrevido a prorrogar para dejarle el marrón al nuevo Gabinete que surja el 20 N.
Pero como la situación no admite espera, las autonomías del PP, de CiU en Cataluña y el propio PSOE, en Andalucía, ya están aplicando esos recortes en sanidad y educación, en farmacia y hasta negando la subvención a las residencias de ancianos en Cataluña. Total, ¡para lo que nos queda de estar en este valle de lágrimas, Pepe Ignacio?!
Y menos mal que no les ha dado tiempo de aprobar la "ley de muerte digna". Habrán pensado que ya con una deuda de más de medio billón de euros, que algunos cifran en 750.000 millones, con más de seis millones de parados y hundida la confianza internacional en España. Ese -"concepto discutido y discutible"- que dijo el que tiene la desfachatez de anunciarnos que se va de "inspector de nubes, sentado en una hamaca", pero con una retribución de más de 300.000 euros por no hacer nada. El innombrable, el mayor despilfarrador de nuestra historia, el peor de los presidentes. El que todavía tiene la jeta de reunir a los cabecillas de esta sedicente democracia coronada para despedirse almorzando a nuestra costa.
* * *
Claro, todos los que acudieron a la comida de Bono en el Congreso, como despedida de la legislatura más nefasta de la historia de España, tienen, como ZP, o un puesto vitalicio de consejero de Estado, que él mismo se creó nada más llegar al poder, o se han asegurado latisueldos, con excepcionales cesantías. Y encima va el PP y suscribe un pacto de última hora, de tapadillo, para que los políticos, exparlamentarios que pertenecen a la carrera judicial como fiscales y jueces, esos que, como Bermejo, Camacho o Pumpido, le han hecho sudar la gorda estos años con los "gúrteles" y los "trajes", puedan volver a su carrera sin cumplir el tiempo mínimo que la ley establece entre el cese en la actividad política y la vuelta a la función jurisdiccional.
Y es que no hay solución pacífica, Pepe Ignacio. No hay salida para esta democracia quebrada en la que se pretende que unos pocos sigan viviendo en el lujo a costa del sudor, los sacrificios y las lágrimas de muchos. Si una mayoría de españoles no sabe utilizar su voto, y todavía el 20 N otorga a los liberticidas su confianza para que sigan explotándonos como sanguijuelas que son, en el pecado llevarán la penitencia. Pero no vamos a irnos a Australia o Alemania, como quieren los sociatas para que le dejemos libre la finquita. Seguiremos aquí utilizando la ley para exigirles responsabilidades.
* * *
Si es que llega a superar las trampas que le están poniendo durante esta larga campaña, el PP tiene que contar al pueblo la verdad de lo que se encuentre en los cajones, aunque sea recurriendo a auditorías independientes, como han hecho en Castilla-La Mancha. Aquí no se puede hacer borrón y cuenta nueva. Hay que exigir responsabilidades judiciales y penales. Saber a quién dejan en las diferentes administraciones como espías y termitas de lo que haga el siguiente Gobierno. De entrada, tiene que derogar, como ya ha anunciado, las leyes que han pretendido cambiar la realidad económica y social de España. Desde las del aborto a las de las pródigas subvenciones a paniaguados.
Si Rajoy logra la confianza de una mayoría absoluta holgada para emprender las reformas constitucionales necesarias, debe encontrar una vía democrática para sacarnos del pozo en que nos dejan casi ocho años de desgobierno socialista. Veremos qué se encuentran en los cajones. El que no esté vacío o lleno de facturas y deudas sin pagar tendrá las arcas con telarañas. Ya se habla de que para pagar las pensiones, y en especial la extra de Navidad, deberán echar mano del Fondo de Reserva. ¿Pero queda algo en ese Fondo, después de haberlo invertido en comprar la deuda española que nadie quería?
* * *
Nos esperan días de mucha rabia, sudor y lágrimas. Y confiemos en que la agitación socialista de la calle no nos conduzca también a la violencia que ya ejercitan impunemente los antisistema. Porque el PSOE, igual que ha ignorado la legalidad incumpliendo sentencias de los tribunales contra sus propias leyes-Estatuto de Cataluña, la sentencia contra la inmersión lingüística en Cataluña, la solapada amnistía para los etarras a los que les estamos pagando por colarse en las instituciones que quieren destruir, seguirá acosando a los ciudadanos con las huelgas de sus paniaguados sindicales, de los miles de interinos y contratados a los que no les dio tiempo de hacer fijos, pero a los que deja "enquistados" en las administraciones por si es necesario otro 11M.
Y, entre tanto, con los seis canales de televisión y cientos de radios y medios de comunicación que tienen, tratarán de hacer imposible una gobernación en la que serán necesarios "muchos sacrificios", como dijo el Rey, al salir de la comida con Bono. Nos consta que el monarca está tratando de poner árnica en la tradicional enemiga entre los dos grandes partidos. Pero debería predicar con el ejemplo y "mojarse" más cuando abra la nueva legislatura.
En todo caso, si los ciudadanos no dan al PP la mayoría que es necesaria para reconducir a la nación española por cauces de una paz constructiva, tendrán que darse cuenta de que ya no podemos seguir pagando a tanto mangante. Y si el PSOE pretende seguir agitando la calle y saltándose la ley, de algún modo habrá que pararle los pies. Si pretenden convertir a España en otra Grecia, habrá modo de devolverles a ese exilio al que quieren enviar a la juventud española sin trabajo.
Fuente: EL DÍA.es
Acusan al adversario de lo que ellos han practicado en exceso, y llegan al final de su delictiva gestión alentando o amparando incumplimientos graves de la ley, como la tolerancia con las huestes de "perroflautas indignados" que quieren vivir del Presupuesto sin trabajar, como los sindicatos, o las huelgas de la enseñanza y los manifiestos de los subvencionados de la ceja. Maestros de la mentira, tratan de confundir a los electores. Y acusan al PP de lo que los gabinetes zapateriles han practicado en exceso, llevando a la quiebra a este país un día llamado España, que si quiere sobrevivir a las tropelías socialistas no tiene más remedio que aplicar duros recortes como los que tendremos que asumir los canarios.
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De momento, ya nos están cerrando quirófanos en las Islas. Y después de las elecciones veremos lo que el bipartito nos prepara, con un presidente regional al que se le han agotado los trucos para seguir en el machito. ¡Ya hasta el candidato del PSOE, el exministro del Interior, dice que lo de la "Guanchancha" es un despilfarro! Mientras, despliega una campaña, acusando al presunto futuro Gobierno de Rajoy de que practicará recortes en sanidad, educación y pensiones que ya están ellos aplicando en los actuales presupuestos estatales; que no se han atrevido a prorrogar para dejarle el marrón al nuevo Gabinete que surja el 20 N.
Pero como la situación no admite espera, las autonomías del PP, de CiU en Cataluña y el propio PSOE, en Andalucía, ya están aplicando esos recortes en sanidad y educación, en farmacia y hasta negando la subvención a las residencias de ancianos en Cataluña. Total, ¡para lo que nos queda de estar en este valle de lágrimas, Pepe Ignacio?!
Y menos mal que no les ha dado tiempo de aprobar la "ley de muerte digna". Habrán pensado que ya con una deuda de más de medio billón de euros, que algunos cifran en 750.000 millones, con más de seis millones de parados y hundida la confianza internacional en España. Ese -"concepto discutido y discutible"- que dijo el que tiene la desfachatez de anunciarnos que se va de "inspector de nubes, sentado en una hamaca", pero con una retribución de más de 300.000 euros por no hacer nada. El innombrable, el mayor despilfarrador de nuestra historia, el peor de los presidentes. El que todavía tiene la jeta de reunir a los cabecillas de esta sedicente democracia coronada para despedirse almorzando a nuestra costa.
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Claro, todos los que acudieron a la comida de Bono en el Congreso, como despedida de la legislatura más nefasta de la historia de España, tienen, como ZP, o un puesto vitalicio de consejero de Estado, que él mismo se creó nada más llegar al poder, o se han asegurado latisueldos, con excepcionales cesantías. Y encima va el PP y suscribe un pacto de última hora, de tapadillo, para que los políticos, exparlamentarios que pertenecen a la carrera judicial como fiscales y jueces, esos que, como Bermejo, Camacho o Pumpido, le han hecho sudar la gorda estos años con los "gúrteles" y los "trajes", puedan volver a su carrera sin cumplir el tiempo mínimo que la ley establece entre el cese en la actividad política y la vuelta a la función jurisdiccional.
Y es que no hay solución pacífica, Pepe Ignacio. No hay salida para esta democracia quebrada en la que se pretende que unos pocos sigan viviendo en el lujo a costa del sudor, los sacrificios y las lágrimas de muchos. Si una mayoría de españoles no sabe utilizar su voto, y todavía el 20 N otorga a los liberticidas su confianza para que sigan explotándonos como sanguijuelas que son, en el pecado llevarán la penitencia. Pero no vamos a irnos a Australia o Alemania, como quieren los sociatas para que le dejemos libre la finquita. Seguiremos aquí utilizando la ley para exigirles responsabilidades.
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Si es que llega a superar las trampas que le están poniendo durante esta larga campaña, el PP tiene que contar al pueblo la verdad de lo que se encuentre en los cajones, aunque sea recurriendo a auditorías independientes, como han hecho en Castilla-La Mancha. Aquí no se puede hacer borrón y cuenta nueva. Hay que exigir responsabilidades judiciales y penales. Saber a quién dejan en las diferentes administraciones como espías y termitas de lo que haga el siguiente Gobierno. De entrada, tiene que derogar, como ya ha anunciado, las leyes que han pretendido cambiar la realidad económica y social de España. Desde las del aborto a las de las pródigas subvenciones a paniaguados.
Si Rajoy logra la confianza de una mayoría absoluta holgada para emprender las reformas constitucionales necesarias, debe encontrar una vía democrática para sacarnos del pozo en que nos dejan casi ocho años de desgobierno socialista. Veremos qué se encuentran en los cajones. El que no esté vacío o lleno de facturas y deudas sin pagar tendrá las arcas con telarañas. Ya se habla de que para pagar las pensiones, y en especial la extra de Navidad, deberán echar mano del Fondo de Reserva. ¿Pero queda algo en ese Fondo, después de haberlo invertido en comprar la deuda española que nadie quería?
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Nos esperan días de mucha rabia, sudor y lágrimas. Y confiemos en que la agitación socialista de la calle no nos conduzca también a la violencia que ya ejercitan impunemente los antisistema. Porque el PSOE, igual que ha ignorado la legalidad incumpliendo sentencias de los tribunales contra sus propias leyes-Estatuto de Cataluña, la sentencia contra la inmersión lingüística en Cataluña, la solapada amnistía para los etarras a los que les estamos pagando por colarse en las instituciones que quieren destruir, seguirá acosando a los ciudadanos con las huelgas de sus paniaguados sindicales, de los miles de interinos y contratados a los que no les dio tiempo de hacer fijos, pero a los que deja "enquistados" en las administraciones por si es necesario otro 11M.
Y, entre tanto, con los seis canales de televisión y cientos de radios y medios de comunicación que tienen, tratarán de hacer imposible una gobernación en la que serán necesarios "muchos sacrificios", como dijo el Rey, al salir de la comida con Bono. Nos consta que el monarca está tratando de poner árnica en la tradicional enemiga entre los dos grandes partidos. Pero debería predicar con el ejemplo y "mojarse" más cuando abra la nueva legislatura.
En todo caso, si los ciudadanos no dan al PP la mayoría que es necesaria para reconducir a la nación española por cauces de una paz constructiva, tendrán que darse cuenta de que ya no podemos seguir pagando a tanto mangante. Y si el PSOE pretende seguir agitando la calle y saltándose la ley, de algún modo habrá que pararle los pies. Si pretenden convertir a España en otra Grecia, habrá modo de devolverles a ese exilio al que quieren enviar a la juventud española sin trabajo.
Fuente: EL DÍA.es
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