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martes, 25 de octubre de 2011

Ikea propone que la calle de acceso se llame 'Me falta un tornillo', entre otras opciones

VALLADOLID

 
Los internautas podrán elegir nombres como 'Del abrazo en el sofá' o 'Como en casa, nada'

 
25.10.11 - 00:21 - FRANCISCO IZQUIERDO | VALLADOLID.
Si a alguien se le ocurriera escribir un libro dedicado a la llegada de Ikea a Valladolid tendría muchos capítulos y páginas. Las primeras negociaciones, las dificultades que aparecieron para facilitar las licencias pertinentes o los procesos de contratación serían algunos de los asuntos que, seguro, se tratarían. Pero, sin duda, no podría faltar uno dedicado a la elección del nombre de las calles que conectarán el municipio con el centro comercial.
 
Porque, desde ayer, la empresa ha dejado en manos de los cibernautas la última palabra. Así, serán ellos quienes, con una votación a través del perfil en Facebook de la compañía (www.ikea.es/facebook), fijen el nombre de ese vial. Y además lo harán entre tres opciones más que curiosas. 'Me falta un tornillo', 'Como en casa, nada' y 'Del abrazo en el sofá' forman la terna de posibilidades que la multinacional del mueble de montaje pone a disposición de los potenciales votantes.
 
Unos nombres, cuanto menos, llamativos, y de los que saldrá el definitivo. Y es que el que más votos consiga será el que el Ayuntamiento de Arroyo de la Encomienda conceda a la calle en la que se ubica la nueva tienda. Además, entre todos los participantes en la votación, Ikea sorteará una decena de reproducciones personalizadas de la placa con el nombre de la calle elegido en última instancia.
 
Una circunstancia que confirmó el alcalde del municipio, José Manuel Méndez, quien dejó muy claro que «en todo momento la empresa nos ha mantenido informados del proceso que quería llevar a cabo para elegir el nombre». Es más, indicó que «sabíamos que se haría a través de un concurso de ideas que se votaría por las redes sociales». Ni siquiera los posibles nombres le sorprendieron «porque ya sabíamos que irían relacionados con la empresa y su sector».
 
Por su parte, desde la oposición, tanto la portavoz municipal del Partido Popular, María Ángeles Cantalapiedra, como el del PSOE, Ismael Bosch, coincidieron en valorar la idea como «poco seria», además de ratificar, una vez más, su conformidad con «la implantación de la empresa en el municipio». Así, Cantalapiedra destacó que «la elección del nombre de las calles debe de ser competencia de la Corporación municipal a través de un consenso», por lo que criticó que «el alcalde haya cedido esta facultad a una empresa privada».
 
Una línea similar a la que defendió Bosch, quien subrayó que «tanto el proceso de elección, como los nombres que se barajan, me parecen ridículos». Incluso calificó las opciones como «una frivolidad de la compañía que me parece absolutamente innecesaria».
 
Desde el cariño
 
«En ningún momento hemos querido que nadie se sienta ofendido. Aceptamos que pueda haber críticas, pero hemos cuidado, como siempre, usar un humor blanco y siempre desde el cariño». De esa manera se expresó el responsable de Comunicación de Ikea, Rodrigo Sánchez, tras conocer las críticas de la oposición municipal tanto al proceso de selección del nombre, como de las opciones para nombrar al vial que comunicará el complejo con La Flecha.

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