Buscador Google

Búsqueda personalizada

sábado, 20 de agosto de 2011

Los misántropos racistas que definieron la cultura popular

Pistas

Howard apenas ganó 10.000 dólares en vida con su literatura, que hoy estrena una adaptación al cine millonaria

El creador de Conan dijo que la barbarie es "el estado natural" del hombre
Julián Díez - Madrid - 19/08/2011
Misántropos, aquejados de serios complejos de Edipo, racistas y geniales, un grupo de amigos que escribían historias por unos dólares se han convertido con el paso de los años en una de las fuerzas motrices decisivas de la cultura popular. Mañana se estrena la nueva y espectacular adaptación de las aventuras de Conan el Bárbaro, y su presupuesto de 75 millones de euros supone una cifra abismalmente superior a los 10.000 dólares de la época que en total ganó con la literatura su creador, Robert E. Howard, cuando publicó los cuentos en los años treinta.

Howard formaba parte de lo que se ha dado en llamar el Círculo de Lovecraft, el grupo de escritores que se carteaban con el famoso creador de relatos de "horror cósmico" y cuya calidad les hizo trascender de las revistas pulp, publicaciones baratas con historias truculentas y generalmente mal escritas, al olimpo de la literatura popular contemporánea.

Tanto Howard como H.P. Lovecraft, los dos principales integrantes de ese grupo, fallecieron prematuramente cuando vislumbraban la posibilidad del éxito. Howard no llegaría a ver publicado ningún libro en vida; Lovecraft, solo La sombra sobre Innsmouth, en una tirada de 200 ejemplares. El primero se quitó la vida de un disparo en la cabeza a los 30 años, en 1936, después de que le comunicaran que su madre no se despertaría del coma en que se había sumido; el segundo murió un año después, a los 46, de un cáncer de intestino complicado con malnutrición. Mientras Howard creaba en su obra el género conocido "espada y brujería", Lovecraft dio forma a la literatura de terror moderna.

También es común a los dos el hecho de que su obra dispersa fuera convertida por sus albaceas literarios en libros de estructura más o menos coherente, que a lo largo de las décadas pasaron de curiosidades para seguidores fieles a ventas millonarias a nivel mundial y el estatus de pequeños clásicos. En España, son hoy publicados por editoriales de prestigio como Valdemar y Alianza Editorial. Además, a los universos creados por ambos se fueron sumando incontables autores de menor jerarquía, adaptaciones al cómic y finalmente al cine.

Aunque las hazañas de Conan se han multiplicado por mil desde el fallecimiento de Howard, lo cierto es que las historias originales que dejó su creador son tan solo 21, más cuatro inacabadas. Howard escribió otras series situadas en mundos míticos poblados de guerreros y hechiceros -como las de Solomon Kane o Kull-, pero es en estas en las que mejor transmitió su visión sobre la humanidad: "El barbarismo es nuestro estado natural. La civilización es solo un accidente ocasional", escribió.

El mito en el cine

La primera adaptación cinematográfica del personaje de Conan fue dirigida por John Millius en 1982, con guion de Oliver Stone y Arnold Schwarzenegger como el protagonista -más Jorge Sanz como el Conan niño-. La continuación, de menor nivel cinematográfico, llegó dos años después con Conan el destructor. Pese a los continuos rumores de nuevas producciones, dado el rendimiento comercial y la visión del productor Edward Summer de crear una serie "a lo James Bond", el desinterés del luego gobernador de California frustró el proyecto.

Tras sucesivos fracasos de directores como los hermanos Wachowski o Robert Rodríguez, el nuevo Conan cayó en manos del director alemán Marcus Nispel, que ha llevado a cabo una película en 3d que anuncia una recuperación del espíritu original -más salvaje, más nitzscheano- del personaje. Ahora le encarna el gigantón hawaiano Jason Momoa, uno de los actores de acción más activos del momento, en una película con estreno mundial simultáneo y perspectivas de continuidad en caso de éxito.

La afición de Obama y su conversión en guerrero


En un reportaje publicado en 2008 Barack Obama descubría una afición secreta: la de coleccionar cómics de Conan. El hecho despertó la imaginación de un avispado editor, Josh Blaylock, que encargó una serie de aventuras protagonizadas por un bárbaro con el rostro del presidente de tono humorístico. Por el momento se han publicado cinco cómics de Barack the Barbarian: Quest for the Treasure of Stimuli es el título conjunto de los cuatro primeros, a los que siguió The Fall of Red Sarah, con mayor protagonismo para su archirrival, una hechicera con los rasgos de Sarah Palin. Son también personajes George W. Bush, Dick Cheney...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Forges