Hace dos años fui de vacaciones a España para hacer unos 150 kilómetros del Camino de Santiago, una muy importante ruta de peregrinación cristiana de 800 km que va desde los Pirineos hasta Santiago de Compostela. Decidí que iba a empezar a caminar en una pequeña ciudad llamada Ponferrada porque ahi hay un castillo de los templarios que quería conocer.
Les cuento de ese viaje porque en el trayecto en autobús desde Madrid a Ponferrada conocí a una mujer llamada Lupe. Ella fue la primera de muchas personas solidarias y buenas que conocí esos días. Me mostró su ciudad. Hermosa. Antigua y moderna a la vez. Cuidada, limpia.
Me llamó la atención que las esculturas que vi en plazas y parques no correspondían a políticos, militares o fundadores de la Patria, sino a gente comun: un médico que en su vida había atendido gratuitamente a los pobres, un profesor de música rodeado de niños, o un “barquillero” (un vendedor de barquillos y obleas).
“Creo que estamos hartos de héroes a caballo”, me respondió Lupe cuando le pregunté por tan inusual detalle.
Era ya de noche cuando nos sentamos a comer en un restaurante de la plazoleta antigua, a pocos metros del castillo. Ahi duramos horas repasando el estado de situación: la España posfranquista; los partidos políticos actuales; el desempleo que azota a 20% de la población española en edad de trabajar -la mayoría de ellos jóvenes-, la crisis provocada por los bancos con los bonos basura, la enorme cantidad de dinero invertida en el mundo para rescatar a esos bancos…
Entonces, Lupe lamentó que los periodistas, según ella, reproducimos ideas, información y conceptos sin cuestionarlos. Por ejemplo, señaló: “No sé de qué crisis hablan. El dinero está ahi, en alguna parte, probablemente en cuentas secretas que ningún gobierno jamás tocará, de banqueros que jamás irán a prisión. Pero nosotros, todos nosotros, vamos a pagar para que ellos sigan rigiendo el mundo”.
Esbozó una hipótesis que me sonó a loca teoría conspirativa: “las clases medias y bajas de todo el mundo somos invisibles. No nos ven, pero servimos para pagar impuestos. Y para que nada cambie, nos aplican la política del miedo, a la crisis, a perder el empleo, a la inflación, a enfermar, a contagiarnos con el virus del AH1N1. Y entonces nos dicen que ya ni siquiera podemos abrazarnos… Es el reino del miedo. Pero solo hace falta que los invisibles nos demos cuenta de la trampa y del gran poder que tenemos para que todo cambie”.
Me dejó pensando Lupe.
Un año y tres meses después, en diciembre del 2010, un desempleado se prendía fuego en Túnez e inauguraba la "primavera" árabe, comandada por jóvenes deseosos de un cambio en regímenes autocráticos de larga data. Les siguieron los jóvenes españoles “indignados” ante un sistema social y político que muchos consideran injusto. En Chile, los estudiantes apoyados por diferentes sectores de la sociedad, reclaman desde hace tres meses educación gratuita y de calidad.
En el Reino Unido, la muerte de un joven negro provocó hace dos semanas cuatro noches de disturbios en Londres y ciudades vecinas. El primer ministro, David Cameron, dijo que se trataba de vandalismo y descartó cualquier conexión con problemas sociales. Pero el periodista Simon Rogers, del diario 'The Guardian', mapeó las direcciones de los más de mil arrestados en las protestas para demostrar que todos ellos provenían de barrios marginales.
Este viernes, en India, un joven de 74 años, Anna Hazare, seguidor del mahatma Gandhi, inició una huelga de hambre de 15 días contra un proyecto de ley anticorrupción que, paradójicamente, descarta la posibilidad de investigar a altos funcionarios de la Administración como magistrados, ministros o el propio jefe del Gobierno. "La juventud de este país ha despertado, por eso un gran futuro para este paÍs no está lejos. Los traidores que han robado a este país ya no serán tolerados", dijo el activista ante miles de seguidores en Nueva Delhi.
Ante todo esto, me pregunto: ¿Tendría razón Lupe? ¿Será que hay invisibles sobre el planeta que están creyendo que hay otra realidad posible? ¿Será que tendremos que abrir más los ojos para ver lo que está pasando en el mundo?
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A propósito de lo que sucede en el mundo, los invito a acompañarnos el miércoles a las 9 a.m. en un chat-entrevista con el doctor Leiner Vargas, economista de la Universidad Nacional, con quien abordaremos el tema de la crisis de la deuda.
Fuente: LA NACIÓN
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