20-08-2011
Blanco señala que el PP sólo se dedica a “sus intereses personales” frente a los del Ejecutivo. Sostiene que los ciudadanos demandan “medidas” y no ir a las urnas cuanto antes. El portavoz pide “paciencia” ante próximas reformas.
Miguel Gil.
El Gobierno cerró ayer definitivamente la puerta a un nuevo adelanto de las próximas elecciones generales a octubre amparado en una agenda reformista sobre la que no informa. Su portavoz, el ministro de Fomento José Blanco, esgrimió desde Moncloa que “los ciudadanos quieren que se tomen medidas” desde el Ejecutivo socialista frente a “los intereses electorales” del Partido Popular.
“No se impaciente, una espera de ocho días no es mucha espera”, llegó a señalar Blanco a LA GACETA. El portavoz del Ejecutivo remitía así al próximo Consejo de Ministros en respuesta a una pregunta sobre la petición de un nuevo adelanto de los comicios que reclaman CiU y el PP, y las reformas que pretende José Luis Rodríguez Zapatero antes del 20 de noviembre que justificarían aquella fecha electoral.
José Blanco reiteró como días antes que España “es un país serio” en el que su presidente ya ha convocado los comicios mientras que el Partido Popular pensaría sólo “en sus intereses personales” (sin aludir a CiU). Frente a este, según el portavoz, el Gobierno y “los ciudadanos quieren que se tomen medidas” para reducir el déficit y procurar la salida de la crisis.
“Sólo los que piensan en sus intereses personales y no del país hablan de un tema que no preocupa a los ciudadanos”, zanjó Blanco, quien presentó ayer junto a la vicepresidenta económica, Elena Salgado, el decreto ley que aprobó horas antes el Consejo de Ministros extraordinario con la reducción temporal y excepcional del IVA para la compra de viviendas nuevas (del 8% al 4% hasta el próximo 31 de diciembre 13 meses después de subirlo), el ahorro farmacéutico mediante la prescripción de medicamentos por principio activo (supondrá un ahorro de 2.400 millones de euros junto a otras medidas) y el anticipo del pago del Impuesto de Sociedades de las empresas que facturan más de 20 millones de euros.
El Gobierno aseguró ayer que la prescripción de medicamentos por principio activo “no tiene nada que ver” con el catálogo de medicamentos gallego impulsado por Alberto Núñez Feijóo, el que el Gobierno recurrió sin éxito ante el Tribunal Constitucional.
El último europeo
José Luis Rodríguez Zapatero comparecerá el próximo martes en el Congreso durante un Pleno extraordinario en el que, además de explicar su actuación durante el repunte de la crisis de la deuda española, el Ejecutivo convalidará su nuevo decreto ley de ajuste del déficit. Ayer ya contaba con el sí del PNV, mientras que CiU apostaba por la abstención por su desacuerdo con el anticipo del pago del Impuesto de Sociedades. De esta forma, el presidente del Gobierno será el dirigente europeo afectado por una prima de riesgo a las puertas del abismo que comparece con más retraso ante su Parlamento.
El Gobierno cerró ayer definitivamente la puerta a un nuevo adelanto de las próximas elecciones generales a octubre amparado en una agenda reformista sobre la que no informa. Su portavoz, el ministro de Fomento José Blanco, esgrimió desde Moncloa que “los ciudadanos quieren que se tomen medidas” desde el Ejecutivo socialista frente a “los intereses electorales” del Partido Popular.
“No se impaciente, una espera de ocho días no es mucha espera”, llegó a señalar Blanco a LA GACETA. El portavoz del Ejecutivo remitía así al próximo Consejo de Ministros en respuesta a una pregunta sobre la petición de un nuevo adelanto de los comicios que reclaman CiU y el PP, y las reformas que pretende José Luis Rodríguez Zapatero antes del 20 de noviembre que justificarían aquella fecha electoral.
José Blanco reiteró como días antes que España “es un país serio” en el que su presidente ya ha convocado los comicios mientras que el Partido Popular pensaría sólo “en sus intereses personales” (sin aludir a CiU). Frente a este, según el portavoz, el Gobierno y “los ciudadanos quieren que se tomen medidas” para reducir el déficit y procurar la salida de la crisis.
“Sólo los que piensan en sus intereses personales y no del país hablan de un tema que no preocupa a los ciudadanos”, zanjó Blanco, quien presentó ayer junto a la vicepresidenta económica, Elena Salgado, el decreto ley que aprobó horas antes el Consejo de Ministros extraordinario con la reducción temporal y excepcional del IVA para la compra de viviendas nuevas (del 8% al 4% hasta el próximo 31 de diciembre 13 meses después de subirlo), el ahorro farmacéutico mediante la prescripción de medicamentos por principio activo (supondrá un ahorro de 2.400 millones de euros junto a otras medidas) y el anticipo del pago del Impuesto de Sociedades de las empresas que facturan más de 20 millones de euros.
El Gobierno aseguró ayer que la prescripción de medicamentos por principio activo “no tiene nada que ver” con el catálogo de medicamentos gallego impulsado por Alberto Núñez Feijóo, el que el Gobierno recurrió sin éxito ante el Tribunal Constitucional.
El último europeo
José Luis Rodríguez Zapatero comparecerá el próximo martes en el Congreso durante un Pleno extraordinario en el que, además de explicar su actuación durante el repunte de la crisis de la deuda española, el Ejecutivo convalidará su nuevo decreto ley de ajuste del déficit. Ayer ya contaba con el sí del PNV, mientras que CiU apostaba por la abstención por su desacuerdo con el anticipo del pago del Impuesto de Sociedades. De esta forma, el presidente del Gobierno será el dirigente europeo afectado por una prima de riesgo a las puertas del abismo que comparece con más retraso ante su Parlamento.
Fuente: LA GACETA
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