Sevilla cuenta ya con 7.709 abogados
colegiados, de los cuales 4.646 son hombres y 3.063 mujeres.
Del total, 1.908 están inscritos como no ejercientes.
Una letrada jura en el Colegio de Abogados |
Jorge Muñoz
La
nueva ley de acceso a la Abogacía ha provocado que en el mes de octubre
se hayan producido 432 nuevas colegiaciones en Sevilla, una auténtica
avalancha que sitúa ya al colegio sevillano con 7.709 letrados, de los
cuales 4.646 son hombres, lo que representa el 60,2%, y 3.063 son
mujeres (39,8%).
Las últimas colegiaciones se produjeron hasta casi la medianoche del pasado jueves, justo antes de la entrada en vigor la ley 34/2006, que desde el 1 de noviembre ha modificado el sistema de acceso a la profesión de abogado.
El decano de los abogados sevillanos, José Joaquín Gallardo, confirmó el importante incremento de colegiaciones derivado de la entrada en vigor de la nueva ley -que ha contado con una vacatio legis de cinco años, de las más antiguas que se recuerdan-, y recordó que, a fecha 30 de septiembre, el número de colegiados inscritos era de 7.277.
De los 7.709 abogados que están colegiados ya en Sevilla, el 75,2% están inscritos en la categoría de ejercientes, siendo el caso de 5.801 letrados, mientras que el resto, 1.908, están inscritos en calidad de no ejercientes.
Con estas cifras, Sevilla se mantiene como el cuarto Colegio de abogados a nivel nacional, superado únicamente por los colegios de Madrid, Barcelona y Valencia. El Colegio sevillano, creado en 1706 como filial del madrileño, es además el colegio profesional más antiguo de la ciudad.
Para facilitar las nuevas colegiaciones ante la entrada en vigor de la nueva ley, el Colegio ha agilizado los trámites burocráticos en las últimas semanas. Los nuevos colegiados han tenido que acreditar que estaban en posesión del título de licenciado y, además, abonar dos cuotas: una de 292,50 euros, por la incorporación al colegio, y otra de 101,58 euros que va destinada al Consejo General de la Abogacía Española. A partir de ahora, los 430 nuevos colegiados tendrán que afrontar igualmente una cuota mensual de 40 euros, en la que se incluye la responsabilidad civil profesional.
El decano explicó que a partir de ahora ya no se podrá incorporar al colegio ningún licenciado que hubiese obtenido el título antes del 31 de octubre de 2011, aunque de forma excepcional se permitirá a aquellos que hayan obtenido la licenciatura a partir del 31 de octubre de 2011 durante los próximos dos años a contar desde la fecha en la que hubieran obtenido la licenciatura.
Para el resto, la nueva ley contempla que para obtener el título profesional de abogado será necesario poseer el título de licenciado, graduado en derecho u otro título universitario de grado equivalente, y además se deberá acreditar la superación del máster en Abogacía, que incluye un periodo de prácticas en instituciones, entidades o despachos, y superar una prueba de evaluación final. La formación será impartida en universidades públicas o privadas, aunque también podrá ser impartida por las escuelas de práctica jurídica de los colegios de abogados.
A partir del año que viene la Escuela de Práctica Jurídica del Colegio de Abogados De Sevilla, que lleva 38 años formando a los abogados jóvenes que quieren adquirir formación y con un "coste importante" para el propio colegio, también impartirá el máster de la Abogacía, cumplimiento los requisitos establecidos por los ministerios de Justicia y de Educación. El máster comenzará a impartirse en octubre de 2014, anunció el decano.
José Joaquín Gallardo recordó ayer que la ley de acceso a la Abogacía era una reivindicación histórica de la Abogacía española que data del "congreso de León, en tiempos de Franco, donde los abogados alzaron la voz contra la pena de muerte y empezaron a reivindicar que se regulase el acceso a la condición de abogado", precisó el letrado. La reforma, según Gallardo, era "absolutamente necesaria para garantizar que quien adquiera la condición de abogado sea capaz de prestar un servicio de calidad profesional".
Las últimas colegiaciones se produjeron hasta casi la medianoche del pasado jueves, justo antes de la entrada en vigor la ley 34/2006, que desde el 1 de noviembre ha modificado el sistema de acceso a la profesión de abogado.
El decano de los abogados sevillanos, José Joaquín Gallardo, confirmó el importante incremento de colegiaciones derivado de la entrada en vigor de la nueva ley -que ha contado con una vacatio legis de cinco años, de las más antiguas que se recuerdan-, y recordó que, a fecha 30 de septiembre, el número de colegiados inscritos era de 7.277.
De los 7.709 abogados que están colegiados ya en Sevilla, el 75,2% están inscritos en la categoría de ejercientes, siendo el caso de 5.801 letrados, mientras que el resto, 1.908, están inscritos en calidad de no ejercientes.
Con estas cifras, Sevilla se mantiene como el cuarto Colegio de abogados a nivel nacional, superado únicamente por los colegios de Madrid, Barcelona y Valencia. El Colegio sevillano, creado en 1706 como filial del madrileño, es además el colegio profesional más antiguo de la ciudad.
Para facilitar las nuevas colegiaciones ante la entrada en vigor de la nueva ley, el Colegio ha agilizado los trámites burocráticos en las últimas semanas. Los nuevos colegiados han tenido que acreditar que estaban en posesión del título de licenciado y, además, abonar dos cuotas: una de 292,50 euros, por la incorporación al colegio, y otra de 101,58 euros que va destinada al Consejo General de la Abogacía Española. A partir de ahora, los 430 nuevos colegiados tendrán que afrontar igualmente una cuota mensual de 40 euros, en la que se incluye la responsabilidad civil profesional.
El decano explicó que a partir de ahora ya no se podrá incorporar al colegio ningún licenciado que hubiese obtenido el título antes del 31 de octubre de 2011, aunque de forma excepcional se permitirá a aquellos que hayan obtenido la licenciatura a partir del 31 de octubre de 2011 durante los próximos dos años a contar desde la fecha en la que hubieran obtenido la licenciatura.
Para el resto, la nueva ley contempla que para obtener el título profesional de abogado será necesario poseer el título de licenciado, graduado en derecho u otro título universitario de grado equivalente, y además se deberá acreditar la superación del máster en Abogacía, que incluye un periodo de prácticas en instituciones, entidades o despachos, y superar una prueba de evaluación final. La formación será impartida en universidades públicas o privadas, aunque también podrá ser impartida por las escuelas de práctica jurídica de los colegios de abogados.
A partir del año que viene la Escuela de Práctica Jurídica del Colegio de Abogados De Sevilla, que lleva 38 años formando a los abogados jóvenes que quieren adquirir formación y con un "coste importante" para el propio colegio, también impartirá el máster de la Abogacía, cumplimiento los requisitos establecidos por los ministerios de Justicia y de Educación. El máster comenzará a impartirse en octubre de 2014, anunció el decano.
José Joaquín Gallardo recordó ayer que la ley de acceso a la Abogacía era una reivindicación histórica de la Abogacía española que data del "congreso de León, en tiempos de Franco, donde los abogados alzaron la voz contra la pena de muerte y empezaron a reivindicar que se regulase el acceso a la condición de abogado", precisó el letrado. La reforma, según Gallardo, era "absolutamente necesaria para garantizar que quien adquiera la condición de abogado sea capaz de prestar un servicio de calidad profesional".
Fuente: diariodesevilla.es
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