Último barómetro de este organismo
Cinco Días - Madrid - 05/04/2012 - 07:00
El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) confirmó ayer lo que
algunos medios habían interpretado en sus crónicas posteriores a la
huelga general: los paros tuvieron un seguimiento desigual por sectores y
por territorios. El último barómetro de este organismo, elaborado tras
entrevistar a 2.474 personas entre el 2 y 11 de marzo (solo dos semanas
antes del 29-M), constata que solo es citado como el mayor problema en
el 1,2% de las entrevistas.
En la encuesta, el desempleo repite como el principal problema para los españoles, con un 84% de las respuestas, seguido por la coyuntura económica, con un 50%. La clase política y los partidos siguen anclados en el tercer lugar que conquistaron en febrero de 2010, aunque esta vez bajan algo más de un punto y pasan el 19,4 % de febrero al 18,1%.
Por contra, la inquietud por la corrupción y el fraude subió casi cuatro puntos respecto al sondeo anterior y llegó al 12,1%, situándose al mismo nivel que en enero, cuando irrumpió como cuarto problema, coincidiendo con los ecos mediáticos de casos relevantes como el juicio como la causa de los trajes contra el expresidente valenciano Francisco Camps, el proceso sobre el expresidente balear Jaume Matas por el caso Palma Arena, la investigación al Instituto Nóos que dirigía el yerno del Rey, Iñaki Urdangarin, o las acusaciones de un empresario gallego contra el exministro socialista José Blanco.
El quinto puesto de la lista fue para la educación, que pasó del 6,3% al 9,9%. La preocupación por la sanidad también se elevó, en este caso 2,2 puntos, hasta alcanzar el 9,3% de alusiones y colocarse en el sexto lugar. La lista se completa con la inmigración como séptima mayor preocupación.
Respecto a los problemas subjetivos que más afectan a los entrevistados, el primero vuelve a ser el paro (45,2%), seguido de los de índole económica (40,3%) y la sanidad (8%). Si en febrero el cuarto eran las pensiones y el quinto la educación, el orden se invirtió en marzo, con un 6,7% para las primeras y un 7,6% para las segundas.
En la encuesta, el desempleo repite como el principal problema para los españoles, con un 84% de las respuestas, seguido por la coyuntura económica, con un 50%. La clase política y los partidos siguen anclados en el tercer lugar que conquistaron en febrero de 2010, aunque esta vez bajan algo más de un punto y pasan el 19,4 % de febrero al 18,1%.
Por contra, la inquietud por la corrupción y el fraude subió casi cuatro puntos respecto al sondeo anterior y llegó al 12,1%, situándose al mismo nivel que en enero, cuando irrumpió como cuarto problema, coincidiendo con los ecos mediáticos de casos relevantes como el juicio como la causa de los trajes contra el expresidente valenciano Francisco Camps, el proceso sobre el expresidente balear Jaume Matas por el caso Palma Arena, la investigación al Instituto Nóos que dirigía el yerno del Rey, Iñaki Urdangarin, o las acusaciones de un empresario gallego contra el exministro socialista José Blanco.
El quinto puesto de la lista fue para la educación, que pasó del 6,3% al 9,9%. La preocupación por la sanidad también se elevó, en este caso 2,2 puntos, hasta alcanzar el 9,3% de alusiones y colocarse en el sexto lugar. La lista se completa con la inmigración como séptima mayor preocupación.
Respecto a los problemas subjetivos que más afectan a los entrevistados, el primero vuelve a ser el paro (45,2%), seguido de los de índole económica (40,3%) y la sanidad (8%). Si en febrero el cuarto eran las pensiones y el quinto la educación, el orden se invirtió en marzo, con un 6,7% para las primeras y un 7,6% para las segundas.
¿A quién culpamos de la crisis?
En su último cuestionario, el
Centro de Investigaciones Sociológicas ha tratado de identificar, a
través de las respuestas de los ciudadanos, quién ha sido el principal
responsable de la actual crisis económica y financiera que vivimos. Y
las respuestas no concentran toda la culpa en un solo estamento: el
30,8% cree que la responsabilidad es exclusiva del Gobierno, mientras
que el 23,6% la achaca a los bancos y el 21,7% restante a la situación
internacional. Los encuestados son bastante pesimistas respecto al corto
plazo, ya que más de la mitad cree que las cosas serán iguales o
peores.
Fuente: Cinco Días.com 
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