Jesús Ollero | 1 de diciembre de 2011 a las 11:55
Como no estoy en el ajo no sé qué hay de cierto en la justificación que ofrece el delegado de Turismo (y algunas cosas más) Gregorio Serrano sobre el ya célebre vídeo de los Reyes al sol. Me cuesta creer que su intención fuera, además de promocionar las virtudes de la ciudad, generar cierta controversia para multiplicar su difusión. Cerremos capítulo pues y pensemos ya en la inminente final de la Copa Davis, el evento de mayor relevancia internacional celebrado en la ciudad desde… ¡la anterior final de la Copa Davis!Cuando el evento se puso a tiro, Sevilla y sus dirigentes dieron un auténtico golpe de efecto en cuanto a imagen. El tema político va aparte (existe, pregunten en Valencia). El Ayuntamiento se apresuró a promocionar un vídeo espectacular, pleno de fuerza, vigor y ambición, muy cuidado, directo y auténtico. Es el que queda justo bajo estas líneas. Y lo acompañó de un lema con fuerza, ya algo inexacto, pero perfecto para encender a las masas: la ciudad talismán.
No sólo el Ayuntamiento estaba haciendo promoción de cierto nivel sobre el evento, un evento de tal calado que ha conseguido reunir 30 patrocinios locales ante el abandono de la Junta. Por poner un ejemplo, el timelapse de Luis Caldevila (abajo) es espectacular.
Transformación Estadio Olímpico Sevilla from Luis Caldevilla on Vimeo.
Pero en algún momento de esta preciosa historia de la Copa Davis se produjo un giro. Un giro hacia un camino menos moderno, más costumbrista. En definitiva, más sujeto a debate, cuando el torneo es un evento incontestable y así debía ser su promoción. Ya comentamos que las incesantes apariciones del alcalde Zoido habían sorprendido mucho en Argentina (¿allí qué hacen los alcaldes?), que su peloteo en la pista tiene un muy escaso valor, que la canción de Álex Ortiz es inclasificable y que el cartel de la flamenca tenista no había por dónde cogerlo.
Bueno, pues lo del cartel es todavía peor de lo que cabía imaginar. No sólo por el hecho de haber adaptado una imagen procedente de un catálogo gratuito de diseño, que también. Brazos y piernas desplazados con photoshop, volantes calcados, flor idéntica… (pocas molestias de adaptación, la verdad). Parece poco serio. Lo más importante es que este evento merecía algo de imaginación, algo de ese talento que tanto se pregona por aquí.
El Ayuntamiento asegura que la flamenca tiene una explicación que, digamos, les exime de culpa. Explican desde el Consistorio que se apoyaron en una empresa (lógico, y más con la premura de tiempo) para desarrollar todos los detalles del pliego de condiciones de la ITF (el dueño del torneo, para entendernos), entre las que se incluye que deben adjuntarse varias opciones para la cartelería oficial entre las que el propio organismo pudiera elegir. Había otras opciones pero les gustó esta, comentan. Añaden que no se plagia nada porque es habitual en el mundo del diseño adquirir imágenes prefabricadas para adaptarlas (internet hervía entre críticas por lo que se consideraba un burdo copieteo) y que por eso precisamente el cartel ha salido la mar de baratito.
Total, que tomando por válida esta puntualización municipal, la ITF ha hecho con su producto lo que ha estimado conveniente. Esta explicación encajaría razonablemente en cómo venía gestionando el Ayuntamiento la promoción del torneo, como se ha explicado más arriba. Ahora bien, si no se presenta un cartel así es imposible que lo cojan. Igual Zoido debería haberle explicado a esa empresa (da igual cómo se llame) ese discurso del talento del que tanto se aleja el cartel.
Fuente: diariodecadiz.es BLOGS Sevilla 2.0 GRUPO JOLY
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