Premium. Automóviles excepcionales
Casualidad o no, los nuevos descapotables de Bentley, Ferrari y Mercedes llegan juntos a las tiendas
Solo Ferrari usa techo duro, pero para retirarlo debe estar parado
Guillermo Lahoz - Madrid - 25/10/2011 - 07:00
Puede que los indignados se indignen aún más, pero lo cierto es que las ventas mundiales de coches de gran lujo van viento en popa. En Bentley esperan vender este año 7.000 unidades, frente a las 5.000 del año pasado (alcanzaron las 10.000 en 2007). De momento están en el buen camino, ya que hasta agosto habían vendido más de 4.000 coches. El negocio ha subido sobre todo en China (+67%), seguido de EE UU (+36%) y Europa (+35), con Alemania como locomotora (+67%). Wolfgang Dürheimer, presidente de Bentley, considera que la confianza de los clientes de EE UU, su principal mercado, está creciendo.
Los datos de Ferrari parecen confirmar las impresiones del directivo alemán. La marca italiana vendió durante el primer semestre 3.577 unidades (+19,6%), un récord histórico. Su principal mercado siguió siendo EE UU con 939 coches (+23,2%). La casa de Maranello comercializó el año pasado casi 300 unidades en China, y solo durante el primer semestre sus cifras ya fueron mayores que en todo 2010, al alcanzar las 378 unidades (+116%). Finalmente, las ventas de Mercedes-Benz en el primer semestre crecieron un 9%, si bien, a diferencia de Bentley y Ferrari, la marca alemana vende muchos automóviles relativamente asequibles. La producción anual prevista del SLS ronda las 5.000 unidades, divididas entre el roadster y el cupé con puertas de ala de gaviota.
Para clientes apasionados
Los nuevos Bentley Continental GTC, el Ferrari 458 Spider y Mercedes SLS Roadster van destinados al mismo tipo de cliente, un apasionado que puede tener cinco o diez coches en el garaje. No obstante, la orientación de cada uno de ellos es diferente. El Ferrari es el deportivo más extremo y pasional, un biplaza idolatrado por los medios especializados y por todos aquellos que lo han probado. Además, y contra lo que podría parecer, es perfectamente cómodo para usar a diario o viajar, gracias sobre todo a su avanzada suspensión activa. El Bentley es el número uno cuando se trata de viajar cómodo y muy rápido con cualquier climatología, con la máxima seguridad y disfrutando del interior más perfecto y suntuoso. El Mercedes, por su parte, se sitúa en un interesante término medio, ni tan llamativo y eficaz como el Ferrari ni tan ostentoso y voluminoso como el Bentley. Es el modelo más emocionante y enfocado a la conducción que Mercedes ha lanzado en las últimas décadas. El sonido bronco de su motor V8 no tiene nada que envidiar al bramido, más agudo, del Ferrari.
Como es casi norma en los deportivos de última generación, los tres modelos llevan sistemas que permiten regular la respuesta del acelerador, la suspensión o el control de estabilidad (sobre todo Ferrari y Mercedes), de modo que pueden ser cómodos cabrios para pasear o bien rápidos cupés para apurar cada curva y cada frenada. Los tres disponen de motores que rondan los 570 CV, si bien las mecánicas del italiano y el alemán se sienten más a gusto girando a muy altas revoluciones. El SLS rinde la potencia máxima a 6.800 revoluciones, y el 458 Spider da lo mejor de sí a 9.000 rpm. La gracia y la novedad de todos ellos es la posibilidad de rodar a cielo abierto.
El Ferrari 458 Spider incorpora un techo duro retráctil mediante un ingenioso sistema. Mientras la tapa que está a la altura del motor se abre, el techo rota sobre un eje y se oculta bajo esa tapa, detrás de los ocupantes. El Bentley y el Mercedes en cambio optan por capotas de lona convencionales de varias capas, más ligeras aunque más vulnerables. Estas últimas ofrecen un aislamiento sorprendente del frío o del agua, e incluso a velocidades muy por encima de 200 km/h no vibran ni trasmiten ruido al interior. De cara a la comodidad de uso hay que destacar también que el SLS se puede descapotar o cubrir en marcha, a un máximo de 50 km/h (32 km/h en el Bentley), mientras que en el Ferrari hay que estar parado.
Peculiaridades chinas
China es donde más crecen las ventas y también donde más situaciones curiosas se producen. Es quizá el único lugar donde algunos clientes no encargan su Bentley a medida. No quieren esperar varios meses, así que van al concesionario y quieren llevarse el que hay. Esto obliga a la empresa a fabricar coches estándar para dichos compradores.
También hay versiones especiales que no se venden en otros lugares, como el Bentley Flying Spur Speed (la versión más potente y de aspecto más deportivo), equipado con suspensiones blandas. Otra curiosidad es que con frecuencia los compradores no tienen carné, sino chófer. Además, a muchos chinos ricos les parece de mal gusto vender su coche usado, y por eso hay poco mercado de segunda mano. Consideran que es mejor ceder el vehículo a un familiar, demostrando así que no necesitan el dinero que puedan sacar del viejo coche.
Los datos de Ferrari parecen confirmar las impresiones del directivo alemán. La marca italiana vendió durante el primer semestre 3.577 unidades (+19,6%), un récord histórico. Su principal mercado siguió siendo EE UU con 939 coches (+23,2%). La casa de Maranello comercializó el año pasado casi 300 unidades en China, y solo durante el primer semestre sus cifras ya fueron mayores que en todo 2010, al alcanzar las 378 unidades (+116%). Finalmente, las ventas de Mercedes-Benz en el primer semestre crecieron un 9%, si bien, a diferencia de Bentley y Ferrari, la marca alemana vende muchos automóviles relativamente asequibles. La producción anual prevista del SLS ronda las 5.000 unidades, divididas entre el roadster y el cupé con puertas de ala de gaviota.
Para clientes apasionados
Los nuevos Bentley Continental GTC, el Ferrari 458 Spider y Mercedes SLS Roadster van destinados al mismo tipo de cliente, un apasionado que puede tener cinco o diez coches en el garaje. No obstante, la orientación de cada uno de ellos es diferente. El Ferrari es el deportivo más extremo y pasional, un biplaza idolatrado por los medios especializados y por todos aquellos que lo han probado. Además, y contra lo que podría parecer, es perfectamente cómodo para usar a diario o viajar, gracias sobre todo a su avanzada suspensión activa. El Bentley es el número uno cuando se trata de viajar cómodo y muy rápido con cualquier climatología, con la máxima seguridad y disfrutando del interior más perfecto y suntuoso. El Mercedes, por su parte, se sitúa en un interesante término medio, ni tan llamativo y eficaz como el Ferrari ni tan ostentoso y voluminoso como el Bentley. Es el modelo más emocionante y enfocado a la conducción que Mercedes ha lanzado en las últimas décadas. El sonido bronco de su motor V8 no tiene nada que envidiar al bramido, más agudo, del Ferrari.
Como es casi norma en los deportivos de última generación, los tres modelos llevan sistemas que permiten regular la respuesta del acelerador, la suspensión o el control de estabilidad (sobre todo Ferrari y Mercedes), de modo que pueden ser cómodos cabrios para pasear o bien rápidos cupés para apurar cada curva y cada frenada. Los tres disponen de motores que rondan los 570 CV, si bien las mecánicas del italiano y el alemán se sienten más a gusto girando a muy altas revoluciones. El SLS rinde la potencia máxima a 6.800 revoluciones, y el 458 Spider da lo mejor de sí a 9.000 rpm. La gracia y la novedad de todos ellos es la posibilidad de rodar a cielo abierto.
El Ferrari 458 Spider incorpora un techo duro retráctil mediante un ingenioso sistema. Mientras la tapa que está a la altura del motor se abre, el techo rota sobre un eje y se oculta bajo esa tapa, detrás de los ocupantes. El Bentley y el Mercedes en cambio optan por capotas de lona convencionales de varias capas, más ligeras aunque más vulnerables. Estas últimas ofrecen un aislamiento sorprendente del frío o del agua, e incluso a velocidades muy por encima de 200 km/h no vibran ni trasmiten ruido al interior. De cara a la comodidad de uso hay que destacar también que el SLS se puede descapotar o cubrir en marcha, a un máximo de 50 km/h (32 km/h en el Bentley), mientras que en el Ferrari hay que estar parado.
Peculiaridades chinas
China es donde más crecen las ventas y también donde más situaciones curiosas se producen. Es quizá el único lugar donde algunos clientes no encargan su Bentley a medida. No quieren esperar varios meses, así que van al concesionario y quieren llevarse el que hay. Esto obliga a la empresa a fabricar coches estándar para dichos compradores.
También hay versiones especiales que no se venden en otros lugares, como el Bentley Flying Spur Speed (la versión más potente y de aspecto más deportivo), equipado con suspensiones blandas. Otra curiosidad es que con frecuencia los compradores no tienen carné, sino chófer. Además, a muchos chinos ricos les parece de mal gusto vender su coche usado, y por eso hay poco mercado de segunda mano. Consideran que es mejor ceder el vehículo a un familiar, demostrando así que no necesitan el dinero que puedan sacar del viejo coche.
Rolls-Royce anuncia que aumentará su producción
Las cosas van tan bien para Rolls-Royce Motor Cars (integrada en BMW Group) que han decidido incrementar su capacidad de producción. Durante el primer semestre las ventas globales crecieron un 64% respecto al mismo periodo de 2010. Los 1.592 automóviles entregados suponen la mayor cifra desde que en 2003 comenzó la etapa BMW para Rolls-Royce, con el lanzamiento del Phantom.
Las ventas en el área Asia-Pacífico crecieron un 170%, y en Oriente Próximo y EE UU, en torno a un 40%. En Europa el tirón se sintió sobre todo en Alemania, con un 60% de incremento. La demanda fue fuerte tanto en los modelos Ghost (disponible en versiones berlina, batalla larga, cupé y descapotable) como sobre todo en el reciente Ghost, un vehículo algo más compacto y con un comportamiento más preciso y deportivo. Además, el 80% de los compradores de este modelo son nuevos para la marca.
Para responder a la creciente demanda, la factoría de Goodwood (West Sussex, Inglaterra) será ampliada. El área de ensamblaje crecerá 2.500 metros cuadrados, y la zona de pintura aumentará su tamaño en 640 metros cuadrados. La inversión prevista para ello es de 12 millones de euros. También están expandiendo la red comercial en Norteamérica, Asia-Pacífico y Europa. Otro de los objetivos prioritarios es ampliar la capacidad de responder a las peticiones individuales de cada cliente, una tendencia al alza.
Este año Rolls-Royce celebra además los 100 años del Espíritu del Éxtasis, la estatua de una mujer alada que lucen en el frontal todos los coches de la marca. El automóvil es el principal sector exportador de Reino Unido, con más de 30.000 millones de euros anuales.
China marca estilo
Los grandes incrementos de ventas de las marcas de lujo se registran en China. Por eso están creando versiones especiales para ellos, como los Rolls-Royce con dragones bordados (2012 es el año del dragón y representa poder, prosperidad y fortuna).
Fuente: Cinco Días.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario