Cultura
Así se desprende de la encuesta de hábitos y prácticas culturales en España 2010-2011, elaborada por el Ministerio de Cultura
Día 30/09/2011 - 18.13h
Parece que el hábito de la crisis no hace al monje de la cultura. Así se desprende de la Encuesta sobre Prácticas Culturales 2010-2011 que ha elaborado el Ministerio de Cultura. Con anterioridad se redactó en el periodo 2006-2007. No es que hayamos dejado de irnos de cañas para jugarnos la vida por los libros y la pintura, pero estamos manteniendo el tipo a pesar de tener los bolsillos vacíos y las cuentas no ya corrientes, sino tirando a vulgares.
A pesar de las penurias, se observa, por ejemplo, un crecimiento en cuanto a asistencia a exposiciones, archivos, yacimientos y monumentos. El ballet y la danza también prosperan entre nuestros gustos, mientras que el teatro, la ópera, la zarzuela y los conciertos descienden ligeramente. Según Cultura, de ello se desprendería que “la crisis económica no ha repercutido en los hábitos de consumo de cultura de los españoles”.
En cuanto al propio procedimiento de la encuesta también hay algunas novedades. Así, en el sector de la lectura, por vez primera se ha investigado el formato que usa el lector español. En concreto, el 58,3 por ciento de nuestros compatriotas utilizó libros en soporte papel y el 6,5 libros en soporte digital. Incluso, hay un 4,1 por ciento de valientes que asegura que lee directamente en Internet. Y ya que pasamos por la red, conviene subrayar que más de un 20 por ciento de las entradas se adquieren por esa vía, cuyo uso para oír la radio, ver la televisión o vídeos se sitúa aún en cifras bajas: el 8,4, el 5,9 y el 6,8 por ciento respectivamente. Y si nos ponemos lúdicos, un 13,7 por ciento de nuestros paisanos se divierten con videojuegos, cifra que, evidentemente, aumenta en el segmento de población más joven.
Si vamos directamente a las cifras, el 84,4 por ciento escucha música; el 58,7 lee, y el 49,1 va al cine. A continuación se sitúan las visitas a monumentos (39,5 por ciento); la asistencia a museos (30,6) o exposiciones (25,7) y a conciertos de música popular (25,9). Asisten a bibliotecas (el 20,5 por ciento de españolitos); al teatro (el 19,0); a yacimientos arqueológicos (el 13,9); a galerías de arte, (13,6); a conciertos de música clásica (el 7,7); a la danza (el 6,1); a la ópera (el 2,6); a la zarzuela, (el 1,6).
Igualmente, la encuesta ofrece datos elocuentes sobre las actividades artísticas que practican los españoles, de manera que podemos saber que se dedican habitualmente a la fotografía un 29,1 por ciento de los ciudadanos, en tanto que a la pintura o el dibujo lo hace un 13,2. Vocación de escritor la tiene el 7,1 por ciento de los españoles que asegura que escribe con regularidad, en tanto que en lo que refiere a artes musicales un 8 por ciento toca algún instrumento y el 2,4 canta en un coro. Mutis por el foro lo hacen el 2,1 por ciento de los españoles que se dedican al teatro. El 3,9 hace lo propio con el ballet o la danza.
Evidentemente, las nuevas tecnologías han irrumpido con fuerza en este el mundo cultural. Un 22,8 por ciento de los españoles escucha música por ordenador, un 55,2 tiene móvil con reproductor de música, y un 25,2 utiliza el ordenador o aparatos conectados al ordenador para ver vídeos. En lo que se refiere a la compra de productos sujetos a propiedad intelectual los datos también son relevantes. La mayoría de quienes compran libros (34,9 cada trimestre) lo hace en establecimientos, y la descarga gratuita por Internet o las fotocopias, solo son practicadas por el 0,6 por ciento de la población. Igualmente, el 11,7 por ciento de los encuestados ha realizado compras de música grabada en el último trimestre, la mayor parte en una tienda del ramo. En ese mismo periodo de un trimestre, el 17,7 por ciento de los españoles se descarga música gratuita en Internet.
Por último, parece que el futuro no es tan negro como se pinta en cuanto a nuestros hábitos culturales, ya que, siempre según la encuesta de Cultura, “los jóvenes presentan las tasas de participación cultural más altas prácticamente en todos los ámbitos: visitan más museos, monumentos, etc.; asisten más a espectáculos escénicos o musicales, leen más, van más a bibliotecas, compran más; realizan más prácticas culturales activas”. Que cunda el ejemplo.
Fuente: ABC
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